Nah, a la gente como tú si no tenéis internet 24 horas en el bolsillo os da un infarto.
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La nostalgia es sintomática de decadencia, de muerte. Normalmente, es en la vejez cuando uno se vuelve nostálgico, pues sabe que le queda poco. El que es nostálgico con 20 años lo es porque no tiene futuro, porque no hay futuro.
Mención especial a los egeberos y sus técnicas de crianza basadas en decirles a sus hijos que nunca vivirán sus fiestas, música, etc. se habla mucho de los boomers y poco de los X.
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#2 #2 bonibonito dijo: La nostalgia es sintomática de decadencia, de muerte. Normalmente, es en la vejez cuando uno se vuelve nostálgico, pues sabe que le queda poco. El que es nostálgico con 20 años lo es porque no tiene futuro, porque no hay futuro.
Mención especial a los egeberos y sus técnicas de crianza basadas en decirles a sus hijos que nunca vivirán sus fiestas, música, etc. se habla mucho de los boomers y poco de los X.@bonibonito ¿Podrías desarrollar el segundo párrafo?
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#3 #3 alma_podrida dijo: #2 @bonibonito ¿Podrías desarrollar el segundo párrafo?Soy de la opinión de que las identidades, que son «psicológicas» cuando se analizan aislando al individuo y «sociopolíticas» cuando se considera al individuo dentro de dinámicas colectivas, conforman una necesidad humana. En la posmodernidad, todas las identidades tradicionales, en el mejor de los casos, se han relativizado, cuando no han sido objeto de «deconstrucción» y estigmatización. Por supuesto, el peso de la tradición es tan potente que no desaparece por medio siglo de propaganda, pero las generaciones que hemos nacido en la segunda mitad de siglo xx y en el siglo xxi ya no conceptualizamos la realidad del mismo modo. Somos hijos de un paradigma diferente.
En ese contexto contemporáneo, fomentado por publicistas, hay un parámetro identitario que ha cobrado mucha fuerza: la generación. Se entiende fácil si pensamos en las posibilidades de negocio que ello tiene y si tenemos en cuenta que todos, más que menos, hemos sido socializados en el arte popular, en la industria cultural de masas: música, películas, series...
Sigo en el siguiente mensaje.
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#3 #3 alma_podrida dijo: #2 @bonibonito ¿Podrías desarrollar el segundo párrafo?Se juntan distintos elementos psicosociales respecto a los egeberos, tales como peterpanismo, cambios de entorno (pareja, amigos, etc.) a edades de madurez, importancia creciente de aficiones y vida social, redes sociales (sí, los adultos también han cambiado ciertas formas de interacción por la tecnología, o, directamente, ya crecieron con ella en forma de primeros móviles, Messenger, etc.)… En un mundo cambiante y sin referencias claras, la gente busca seguridad, definirse, valorarse comparativamente.
Bien, tenemos las condiciones ideales para que una actitud concreta prospere, alimentada por la industria y los medios de comunicación. Esa actitud es la del chovinismo generacional, si se me permite la expresión. Algo que podría parecer inofensivo, comprensible, gracioso, en realidad tiene un poder devastador, pues se suma a realidades materiales, como el empobrecimiento generalizado, para construir discursos aciagos contra la juventud. Infunden nostalgia entre sus hijos, les hacen creer que son más burros, menos capaces, ridiculizan sus ropas, sus gustos... Para mí, se trata de violencia psicológica/ideológica legitimada, una forma de acomplejar a los chavales.
En los 80/90 había drogas, había peleas, había abusos, etc. Y nos quieren vender que fue el cielo en la tierra. Mira, no. Está bien poner en valor ciertas cosas, no digo que no, pero educar a tus hijos para mirar atrás y no hacia delante es lamentable.
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Mención especial a los egeberos y sus técnicas de crianza basadas en decirles a sus hijos que nunca vivirán sus fiestas, música, etc. se habla mucho de los boomers y poco de los X.
Mención especial a los egeberos y sus técnicas de crianza basadas en decirles a sus hijos que nunca vivirán sus fiestas, música, etc. se habla mucho de los boomers y poco de los X.@bonibonito ¿Podrías desarrollar el segundo párrafo?
En ese contexto contemporáneo, fomentado por publicistas, hay un parámetro identitario que ha cobrado mucha fuerza: la generación. Se entiende fácil si pensamos en las posibilidades de negocio que ello tiene y si tenemos en cuenta que todos, más que menos, hemos sido socializados en el arte popular, en la industria cultural de masas: música, películas, series...
Sigo en el siguiente mensaje.
Bien, tenemos las condiciones ideales para que una actitud concreta prospere, alimentada por la industria y los medios de comunicación. Esa actitud es la del chovinismo generacional, si se me permite la expresión. Algo que podría parecer inofensivo, comprensible, gracioso, en realidad tiene un poder devastador, pues se suma a realidades materiales, como el empobrecimiento generalizado, para construir discursos aciagos contra la juventud. Infunden nostalgia entre sus hijos, les hacen creer que son más burros, menos capaces, ridiculizan sus ropas, sus gustos... Para mí, se trata de violencia psicológica/ideológica legitimada, una forma de acomplejar a los chavales.
En los 80/90 había drogas, había peleas, había abusos, etc. Y nos quieren vender que fue el cielo en la tierra. Mira, no. Está bien poner en valor ciertas cosas, no digo que no, pero educar a tus hijos para mirar atrás y no hacia delante es lamentable.