#5 Joaquín es un pervertido, jaja

#1 No, porque en el cielo eres libre otra vez y puedes ******* con otros angeles

Y que mas dará, si total la evolución nos hará perderlo. Esta ahí, pero no sirve pa' na. En realidad estas tías están mas evolucionadas que nosotros.

P.D. Es medio broma, no me matéis a negativos

El caso es quejarse por todo. Yo en mi puta vida he hecho nada, pero nunca me he quejado si suspendía. Ahora que apruebo veo como los que menos se esfuerzan son los que mas pegas ponen a todo siempre. Han llegado a decir que mis trabajos, los que me gusta hacer bien sin mas, condicionan los demás, ¡y los presentan en putas hojas del cuaderno arrancadas mal y rápido!, ¡con tachones y letrujas! Pero es mas fácil que los demás bajen el listón que ponerle algo de ánimo y empeño a las cosas. Ademas es que claro, los de las buenas notas están en un lugar aparte, pero a ellos tampoco les digas que son tontos ¡Que les den, yo no voy a condicionarme!

Yo estoy pasando por la época "¿y de que coño sirve? Si total, todos vamos a morir..." y también me cuesta levantarme y hacer cosas

Putos padres sobreprotectores, que asco me dan. Mi madre trabaja como cuidadora y una vez uno de estos seres le vino diciendo que su hija le contó que mi madre le había tirado literalmente una jarra de agua por encima, siendo que a la niña, sin querer, se le caía su vaso a menudo. Los niños a veces se inventan cosas, no es para ir a denunciar como una puta loca sin hablar siquiera con el adulto, y siendo ademas tan surrealista. Vamos digo yo...

Totalmente de acuerdo, pero teniendo en cuenta que la publicidad es lo que la sociedad demanda no creo que sea el único problema, es la pescadilla que se muerde la cola. Se lleva lo que nos parece estético, el día que se lleven los bigotes nos meteremos con las que se lo depilan. Y otra cosa creo que ya no se piden esos ideales solo en mujeres, empieza a ocurrir también con los hombres, que parece que tienen que estar todos de gimnasio.

Este tenía que decirlo me lo guardo. Es una vergüenza, se ríen en nuestra puta cara