#2

-Caballero, bienvenido a McDonald's, ¿qué desea?
- (@stocker se queda mudo y señala al panel de las hamburguesas).
-¿Está usted bien?
-(Asiente. Hace el signo de comer una hamburguesa).
-¿Cuál quiere?
-(Saca una libra de la cartera, la parte en cuatro y le enseña uno).
-Cuarto de libra con queso. ¿Menú?
-(@stocker quiere patatas y bebida, pero siente que va a ser difícil explicar qué bebida quiere, así que dice que no, pues el McMenú no es imprescindible).
-Gracias por su pedido, aquí tiene su cambio y la dirección de mi cuñado, psiquiatra.

Bueno, eso sólo les pasa a los que son demasiado buenos, no se dan cuenta que no pueden asimilarlo hasta que les supera. No es sólo cuestión de confianza o predisposición, está en cada uno y en su modo de ser.

Cuesta si al decirlo sabes que dañaras a alguien a quien aprecias, pero si, es mucho mejor hablar las cosas que callarselo todo

A veces dejas pasar algunas cosas porque tampoco tienen mucha importancia, pero si la persona sigue yendo de lista pues es normal que al final se te acabe la paciencia

Eso aunque pasa en todos los grupos es muy muy habitual en las mujeres, que parece que para mantener el equilibrio tenéis que ser super amigas sin roces por delante y luego a rajar con las demás por detrás.
Aunque también lo he visto / vivido con hombres de más de 50 años, así que tampoco quiero generalizar demasiado.

A mi es que la gente me suda bastante la polla, y si algo me molesta lo digo.

Di que sí mujer, a rajar de tus amistades así porque sí.

#6 #6 meatieso dijo: #2

-Caballero, bienvenido a McDonald's, ¿qué desea?
- (@stocker se queda mudo y señala al panel de las hamburguesas).
-¿Está usted bien?
-(Asiente. Hace el signo de comer una hamburguesa).
-¿Cuál quiere?
-(Saca una libra de la cartera, la parte en cuatro y le enseña uno).
-Cuarto de libra con queso. ¿Menú?
-(@stocker quiere patatas y bebida, pero siente que va a ser difícil explicar qué bebida quiere, así que dice que no, pues el McMenú no es imprescindible).
-Gracias por su pedido, aquí tiene su cambio y la dirección de mi cuñado, psiquiatra.jajajajajajjajaajjaja muy bueno

Disculpa, pero tienes una cabeza amelonada y siempre que te veo me dan ganas de comer melón. El problema es que soy pobre y no puedo comprar melón siempre que te veo.
¿Podrías ponerte una gorra o algo que lo disimule un poco cuando nos veamos?

Por ser así me he metido en problemas. Por eso a partir de ahora sólo hablaré para lo imprescindible.