Trabajan menos tiempo pero producen más.
https://www.lainformacion.com/management/jornada-laboral-cuatro-dias-resultados-empresas-paises/2822855/
https://hablemosdeempresas.com/pymes/demostrado-las-jornadas-de-cuatro-dias-son-mas-productivas/
Como dice #1 aelan , las jornadas de 8 horas, pensadas para que una persona que quedara en casa para cuidar a los niños, se implantaron hace ya casi dos siglos, y desde entonces la productividad ha aumentado en varios miles por ciento; no así el poder adquisitivo ni el tiempo libre.
Si pensáis como #0, supongo que estaréis de acuerdo en volver a las jornadas del siglo XIX, de hasta más de 100 horas semanales, porque eso de reducir las jornadas a 40 horas semanales va a arruinar a los empresarios.

¿Querer que tus padres estén orgullosos de tí es un problema?
En mis tiempos, eso era una de las razones que te impulsaban a formarte y crecer como persona.

Vamos a ser honestos, yo he venido aquí porque quiero ganar un sueldo. Si lo que tú me ofreces no me convence, ni yo te hago perder el tiempo a tí, ni tú me lo haces perder a mí.
(Aunque, como dice #2 pavoquetedestruyo , para no perder nada de tiempo, deberían ponerlo en el anuncio siempre).

A mí me da igual lo que diga la RAE que es el feminismo. Donde se ve es en los hechos. Y en las últimas décadas, los actos de las personas, asociaciones y políticas que se llaman feministas no tienen absolutamente nada de igualdad, y sí mucho de lo que antiguamente se llamaba hembrismo.
Tanto decir lo de "todes" y defenderlo con que el lenguaje cambia, pero cuando se trata de decir que el significado de "feminista" también ha cambiado, ah!, ahí ya no interesa.

#8 @tradico Yo entiendo que las promesas electorales son eso, promesas. No son propuestas, ni sugerencias, sino promesas. Y por tanto, todas deberían ser automáticamente con compromiso. Ergo, como tú dices, si no las cumplen, igual que si un trabajador normal no cumple con sus compromisos, pues a la calle.
Y lo de usar las cualiciones como excusa para no cumplir las promesas, como dices en #7 no cuela. Si no vas a poder cumplir las promesas por la cualición, entonces no hay cualición. Igual que cuando hay un trabajo en grupo, y alguien no hace nada y no se presenta el trabajo, el puro es para todos.

¿Que nadie lo critica? Anda, sal un poco de la cueva...

Cuando te enteres de que los que están ahí se llenan los bolsillos, se te mean encima y te dicen que llueve, sean de izquierdas o de derechas, te vas a reir. A reir por no llorar, claro.
Mientras tanto, ellos disfrutando del "divide y vencerás".

#4 @jucalo a mí me parece que lo que tú indicas tampoco es exactamente democracia, sino, usando tu nomenclatura, "dictadura de la mayoría".
Si hay 99 personas que les gusta el bolero y una a la que le gusta la samba, pues tampoco es de recibo que, para una de 99 veces que se pone una samba, al que le gusta ése estilo salga apaleado.
La verdadera democracia es alcanzar un consenso entre todas las partes, no un "como somos mayoría, al que no le guste que se j*da".

Si has leído "El método" de Neil Strauss, el autor dice que lo probó. El resultado fue una mierda.
Las fases del sueño no aparecen por arte de magia en cuanto cierras los ojos.

Como cuando te llega el jefe a última hora del día y te dice que necesita cierto informe urgente para mañana por la mañana... pero sin prisas, ¿eh?
O cuando acabas de trabajar a la 1 y el banco cierra a la 1:30.

En los programas de talento en cantantes (tipo operación triunfo), yo siempre me pregunté por qué no pillan al que peor cante de todos pero se le vea entrega y esfuerzo, y así se ve realmente cómo alguien puede mejorar con esfuerzo y pasión, en vez de elegir a alguien que ya de por sí es de los mejores aún sin formación.

Pues yo voy a opinar que ya no hay parejas porque hace tiempo que no veo a los tunos o a los mariachis cantando a las chicas en las ventanas.
Por decir chorradas que no quede.

De aquí a diez años pensarás que por qué tenías que aguantar a alguien como quien escribió este TQD, posiblemente un p*t* venticincoañero opinando de política

#11 pavoquetedestruyo
[img]https://static.wikia.nocookie.net/wikigual/images/0/00/Denuncias-vs-condenas-2005-2017-13-a%C3%B1os.png/revision/latest?cb=20200815105225&path-prefix=es[/img]

#11 @pavoquetedestruyo Fuente: Informes anuales del observatorio contra la violencia de género del CGPJ. Que tú no te dignes a hacer una búsqueda en google para que A TÍ no se te acaben los argumentos, y en cambio desprecies a tu interlocutor SIN DAR NINGÚN ARGUMENTO no es mi problema.
[img]https://s.libertaddigital.com/2019/03/18/vicfe1.jpg[/img]

Independientemente de donde vivas, dice. Si vives en ciertos sitios, venderías tu alma al diablo por ahorrar 500 euros AL AÑO.
Un buen salario es el que te deja ahorrar una proporción razonable después de tener unos gastos mensuales medianamente holgados.

#8 @derribador2 creo que te has saltado la primera parte de mi comentario.

#1 @rastafiuri El número de denuncias sólo significa que ahora hay muchas mujeres que quieren sacar tajo gracias a una ley desigual. Desde que se creó la LIVG, el número de denuncias se ha triplicado, pero las condenas no han sufrido absolutamente ningún cambio ¿A que no adivinas qué pasa ahí?. Un ejemplo: cuando hay un divorcio, lo primero que el abogado le dice a la mujer es "denuncia". Aunque no se investigue nada, el mero hecho de haber denunciado ya garantiza que la mujer va a ganar muchas cosas en el proceso de separación.

Cualquiera que haya visto One Piece sabe que la lava (Akaniu) es más poderosa que el fuego (Ace) o el hielo (Aokiji).
Ahora en serio. Si no sabes por qué unos hidroaviones no sirven para apagar un volcán sin buscarlo en internet, espero que seas tan joven que aún te queden por cursar unos cuantos años de la ESO.

Si en serio necesitas ser religioso para tener una moral y entender que, por ejemplo, matar a otras personas está mal, lo llevas muy crudo.
Del mismo modo, si necesitas acudir a la iglesia para encontrar seguridad, consuelo y apoyo, me apiado de tí. Es perfectamente conocido que esas sectas se aprovechan de los momentos más débiles de las personas para aprovecharse de ellos.